A principios del año 2014 se culmina el tendido del segundo cable submarino de fibra óptica que conecta Melilla con la Península y que abre la puerta tecnológica al mundo.
Como continuación de este proyecto se ejecutó un Plan Estratégico de Despliegue de Banda Ancha en la Ciudad, que permite a la ciudadanía y empresas melillenses aprovechar las ventajas de aumento de capacidad que ofrece el nuevo cable, y que en este caso concreto se materializará en un despliegue de FTTH.
Este proyecto de mejora en la banda ancha, valorado en 310.200 €, supuso un incremento a corto plazo de la disponibilidad de banda ancha en la Ciudad.
A junio de 2017, por ejemplo, Melilla era el único territorio autonómico con cobertura 100% a la hora de poder llevar fibra óptica en todos los hogares de su territorio.
A día de hoy se dispone de prácticamente el 100% del casco urbano con banda ancha superior (FTTH), lo que posibilita a las empresas de base tecnológica y con importantes necesidades de conectividad implantar sus negocios en cualquier lugar de la Ciudad sin limitaciones en el ancho de banda requerido.